viernes, 21 de mayo de 2010

LOS ACOMPAÑANTES DEL DOLOR

Esta entrada no es para aquellos que tienen poco tiempo para rezar, o que no quieren rezar demasiado.....si estás en este grupo, reza por lo que creas más necesario. Si te daría algunas ideas, como por ejemplo rezar por todos los enfermos.
Pero si eres de los que tiene más tiempo para dedicar a la oración, de los que quieres hacer un esfuerzo extra, aquí te dejo una para que reces por un colectivo que está muy necesitado. Los cuidadores de los enfermos. Ellos no llevan el peso de la enfermedad, por supuesto que no, pero tienen que sacar fuerzas a veces de donde no las tienen, tienen que sonreir cuando quisieran llorar, tienen que hablar cuando quisieran callar, tienen que estar ahí, intentando minorar el sufrimiento de las personas que tienen encargadas.
Va por todos ellos. Basta que penséis cuando pasáis por un hospital la cantidad de habitaciones que tiene. En cada habitación un enfermo o dos. Por cada enfermo una familia completa que sufre, una familia que necesita la fuerza de nuestra oración para poder seguir tirando "palante".


Padre, dirijo ahora mis pensamientos a hacia aquellas personas a las que no les es posible lograr un sueño tranquilo, que no encuentran la paz en su corazón, porque están agobiados por la enfermedad o porque tienen a cargo la atención de un enfermo. De todo corazón te pido por ellos también. Posa tu mirada misericordiosa sobre todos los enfermos, en nuestras familias y hospitales. ¿Quién sino tú puede apaciguar y calmar sus corazones, Señor de todos los corazones? ¡Alivia sus dolores y heridas! Dales amor, para que puedan soportar sus sufrimientos, así como Tu Hijo Jesús soportó el peso de la cruz.

Bendice especialmente a aquellos que cuidan de los enfermos. Permite que su amor por ellos sea inextinguible. Dales el reposo y la paz, por medio del amor que proviene de ti. Maria, Madre siempre fiel, tu que permaneciste al pie de la cruz de tu hijo firme hasta el final. Permite que todos aquellos que no pueden encontrar un reposo tranquilo sientan Tu Presencia. Por medio de Tu oración, obten para ellos la gracia de ofrecer sus sufrimientos a Dios.

…Madre de la consolación, tu sabes bien como el dolor y el sufrimiento pueden llegar a extenuar y a acabar con la fortaleza interior. Por tanto, ora por ellos para que obtengan la paz y la tranquilidad.

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