COMUNION I

Tengo que contar tantas cosas del día de ayer que voy a empezar por lo fácil que es un corta-pega.

Le pedí a Tía Pili que escribiera una poesía para María en el día de su Primera Comunión. La leyó al final de la noche, con Fernando acompañándola a la guitarra.

¡Hola, María!

Quiero pintarte una blanca poesía.
¿Que como se hace eso?
Con el pincel de la palabra,
Impregnándolo de blanco de zinc,
Sobre el lienzo del papel.

Con esto nos puede salir,
Un campo de lirios blancos,
Blancas lilas,
Jazmines blancos que nos dan su aroma.
Blanco tu traje, para recibir al Niño Dios.

Blanca tu alma de niña especial,
En el día de tu Primera Comunión.
Consuelo de los tuyos.
Miel y almíbar en tus besos y caricias.
En tu hogar, brasa de amor y calor.

Se que con tus amigos y primito especial,
vas a disfrutar y jugar.
Tu fiel amigo, tu perrito dirá:
¿Qué pasa María?
¿Qué tiene este día de especial?

Luz y alegría.
Que nunca olvides a la Virgen,
ni a su hijo chiquito,
que con vosotros querría jugar,
en esta tarde de mayo.

Así que ahí va esta blanca poesía,
Para ti, niña María.