lunes, 20 de septiembre de 2010

VIRGEN DE LOS DOLORES


Hace unos días me dejé una entrada a este blog pendiente. La de la Virgen de los Dolores. Aquí está, procuro cumplir lo que prometo.

Esta es la Virgen de los Dolores de Córdoba. En su Iglesia me casé hace 21 años. De entre todas las Iglesias que hay en Córdoba, que son muchas, elegí esta. Nada es fortuito, la providencia hizo su trabajo.

Dicen en mi tierra que no es bueno que llueva en las bodas, que eso significa que vas a derramar muchas lágrimas en tu matrimonio. Pues bien, el día de mi boda hizo un sol espléndido. No derramé muchas lágrimas en mi matrimonio, las justas, y seguro que por tonterías que ahora ni recuerdo. Las lágrimas han venido después.

La Virgen de los Dolores con su corazón "traspasado", tal como se lo anunciaron. muchos años antes. Con lágrimas en los ojos. No hubo lágrimas mientras estuvo al pie de la Cruz, las lágrimas vinieron después, con la soledad, con la pérdida física de Su Hijo.

La Virgen de los Dolores, que a pesar de su fortaleza, de su entrega sin límites, de su confianza absoluta en Dios, no puede menos que señalar con esas lágrimas que su capacidad de dolor se había visto desbordada.
La Virgen de los Dolores, que a pesar de su "sí incondicional", sufre y llora. Ella tampoco escapa del Valle de Lágrimas y de la Cruz.
Si la Virgen con todas sus virtudes es capaz de llorar, ¿por qué no vamos a avergonzar los demás de hacerlo?
Si la Virgen tuvo su Cruz, ¿por qué los demás nos vamos a escapar de ella?

1 comentario:

  1. Interesante reflexión. Es raro encontrar hoy a alguien que se pare a reflexionar acerca del sufrimiento, que existe en toda vida humana y que, sin embargo, queremos fingir que no vemos.

    Felicidades por esos 21 años de matrimonio!

    Un abrazo!

    ResponderEliminar