sábado, 14 de marzo de 2009

POEMA DE AMISTAD COMENTADO

Unos dicen que este poema a la amistad es de Borges. Otros que no. Da igual. Es una maravilla.
En azul el poema. En negro mis comentarios que van especialmente dirigidos a todos vosotros, familiares y amigos, que formáis parte de mi vida.
No puedo darte soluciones para todos los problemas de la vida,
ni tengo respuestas para tus dudas o temores, pero puedo escucharte y compartirlo contigo.
Sé de sobra que si estuviera en vuestra mano, me solucionaríais todos mis dolores. También sé que mis dolores, son vuestros dolores. Yo tampoco puedo hacer nada para remediarlos. Estar en el mismo barco une. Solo podemos intercambiarnos un inmenso cariño.
No puedo cambiar tu pasado ni tu futuro. Pero cuando me necesites estaré junto a ti.
Mi pasado está bien como está. Ya es pasado. Solo para Dios no hay nada imposible. Tengo que confiar en Él y en el futuro que me tenga preparado. Si no es de mi agrado, me dará fuerzas para afrontarlo. Y esas fuerzas en el presente, me las da a través de todos vosotros, poniéndoos a mi lado.
No puedo evitar que tropieces. Solamente puedo ofrecerte mi mano para que te sujetes y no caigas.
Los que me queréis no me decís solo aquello que quiero escuchar. Me decís la verdad, me guste o no me guste. Igual que un padre a sus hijos. Con gran cariño, y con el temor de hacerme daño. No os preocupéis.
Tus alegrías, tus triunfos y tus éxitos no son míos. Pero disfruto sinceramente cuando te veo feliz.
Lo sé. La palabra envidia está eliminada de vuestro vocabulario
No juzgo las decisiones que tomas en la vida. Me limito a apoyarte, a estimularte y a ayudarte si me lo pides.
Y a aceptar un no por respuesta, y a dejarme actuar cuando ya he decidido lo que quiero hacer, aunque vaya en contra de vuestra opinión. Gracias también por respetar mi momentos de soledad. Gracias por respetar mis silencios.
No puedo trazarte limites dentro de los cuales debes actuar, pero si te ofrezco el espacio necesario para crecer.
El apoyo incondicional es más que suficiente
No puedo evitar tus sufrimientos cuando alguna pena te parta el corazón, pero puedo llorar contigo y recoger los pedazos para armarlo de nuevo.
Repito, mis penas son vuestras penas, por tanto no os dejan indeferentes. Nos ayudamos entre todos a pegar esos pedazos.
No puedo decirte quien eres ni quien deberías ser. Solamente puedo quererte como eres y ser tu amigo.
Gracias por aceptarme como soy. Por no querer cambiarme a pesar de mis defectos.
En estos días pensé en mis amigos y amigas, entre ellos, apareciste tu.
No esperaba menos
No estabas arriba, ni abajo ni en medio. No encabezabas ni concluías la lista. No eras el numero uno ni el numero final.
En la amistad no hay listas. Se es amigo y ya está. El que te necesita ese día, es el que está primero.
Y tampoco tengo la pretensión de ser el primero, el segundo o el tercero de tu lista.
A todos os quiero. A todos os necesito. No renunciaria a ninguno de vosotros. Cada uno de vosotros ocupa su lugar y su momento en mi vida. Todos sois igual de importantes. Si faltara uno de vosotros, ese lugar quedaría vacio.
Basta que me quieras como amigo.
Pues si, te quiero y mucho. Nunca lo olvides.

No hay comentarios:

Publicar un comentario