domingo, 3 de enero de 2010

CARTA A LOS REYES MAGOS 2009

Queridos Reyes Magos, hoy vuelvo a encender el ordenador para escribiros mi carta.

Ya lo hice el año pasado . La acabo de leer. No me puedo quejar, de verdad, no me lo concedísteis todo, pero no hay que ser egoista, hay que repartir. Seguro que habéis hecho lo que habéis podido.

Ya habréis salido de Oriente, y quizá mi carta no llegará a tiempo. Pero sois mágicos y la recibiréis por el camino.

Estos días de atrás he estado como casi toda España recogiendo los pedidos que os he hecho para mis hijos y mis seres queridos. Pero lo que a mi me gustaría recibir para mi y para poder entregar a los demás, no lo encuentro en las estanterías de ningún gran almacén. Son cosas que no tienen precio, y que no podremos pagar por mucho límite que nos quede en la Visa.

No voy a ser egoísta y no os voy a pedir muchas cosas, aunque os advierto que no van a ser fáciles.

  • Me gustaría pediros el cielo para todas aquellas personas cercanas que nos han dejado en este año. Puedo poner muchas caras de seres queridos que ya no están. Buena gente todos ellos, y se merecen una eternidad llena de paz. Quisiera pediros la serenidad para sus familiares y para todos los que nos hemos quedado con un vacío en el alma por su pérdida física. Especialmente, quiero que dejéis un paquete grande para esos dos niños pequeños que de una forma traumática perdieron a su padre, y a su mujer para que no se le agote la valentía que tiene.
  • No os podéis olvidar de todos aquellos que necesitan encontrar un sentido a todo lo que les ha ocurrido en este año. A los que les ha sorprendido una enfermedad, y a los que han sido capaces de llegar a pasar otra Navidad en familia. Enseñarles que no tienen que culpar a Dios de su dolor y su sufrimiento. Dejarles a los pies de su cama unas instrucciones, para que encuentren fácilmente la dirección adecuada que les permita llegar hasta la meta final sin resentimientos, sin cansancio. Especialmente te quiero pedir por todos los enfermos de cáncer, por los que me he cruzado con ellos en el Hospital Quirón de Madrid, por esa joven que lloraba amargamente, por esa otra que iba con su bebé, por el que se pasea por el pasillo mientras le ponen la quimioterapia, por la chica que quiere guardar el anonimato, a la que tanto quiero y que tanto miedo ha pasado, a mi amiga que parece que está curada, ...... y a tantas y tantas caras llenas de miedo y desesperanza que veo cuando estoy en esa unidad de oncología.
El año pasado, terminaba mi carta con una petición muy personal. Es difícil, ya lo sé. No me habéis podido conceder todo. No me quejo. Vuelvo a pedir lo mismo, y alguna cosa más: un PSA sin doblajes; ganmagrafías estables, que no salgan con más manchitas negras de las que ya hay, dolores soportables, que podamos olvidar la palabra osteonecrosis que de una forma tan inesperada apareció en nuestro vocabulario. Y además de todo esto, os pido la tranquilidad necesaria para afrontar las revisiones, los sustos, los altibajos, las visitas al hospital durante todo el año 2010.

Si no os veis capaces de traerme todo esto, porque no lo tenéis o porque no depende de vosotros, hablar con vuestro amigo, con el Niño Jesús. Tenéis línea directa con Él y seguro que os ayuda.


No hay comentarios:

Publicar un comentario