PROPOSITOS 2009

En los primeros días del año es muy característico hacer "buenos propósitos". Los hay que se proponen empezar la dieta, otros dejar de fumar, otros aprender definitivamente inglés....No me digáis que no os suena. Ya veo vuestra sonrisa. Seguro que alguna vez habéis empezado el uno de enero a hacer alguna de estas cosas. Y seguro también que antes del 31 de enero lo habíais abandonado.

Por si estáis pensando, o ya lo habéis hecho porque estamos a día 3, empezar alguna de estas hazañas, os voy a contar lo que yo pienso al respecto.

Los propósitos tienen que ser algo concreto. No vale decir, "este año no me voy a enfadar". Es imposible. Podrás controlar la adrenalina las tres primeras veces, pero un día llegarás a casa, y discutirás con tu hijo o con tu marido, y ya está. No podemos proponernos de la noche a la mañana cambiar nuestro caracter. Lo que si podemos decir es " este año intentaré no ser una histérica, pero si me ocurre, tendré la humildad suficiente para pedir perdón". E incluso particularizar. Si hay una persona que especialmente te crispa los nervios, a practicarlo con ella.

Adelgazar, dejar de fumar y hablar inglés está muy bien. Las dos primeras son muy sanas y la tercera muy útil. Sin embargo hay otras cosas igual de sanas y útiles y que además reportan beneficios no solo a nosotros. Por ejemplo, un buen propósito sería sonreir más. Que tu cara no sea el reflejo de tus preocupaciones o de tus problemas.

Hay propósitos que no necesitan demasiado tiempo para cumplirse. No puedes hablar inglés en diez minutos, pero si puedes hacer una llamada de teléfono a una persona a la que guardas rencor. Le felicitas el año, no sacas a relucir los trapos sucios y ya está. Has vuelto a ganar un amigo, un familiar.

También hay propósitos que le vienen muy bien al alma. Si te habías olvidado de ir a Misa los domingos, pues es un buen momento para retomarlo. O quizá rezar alguna oración al levantarte o acostarte.

Este año puede ser muy bueno para que dejes la televisión a la que estás tan enganchado, y cambies media hora de tele por un buen libro, o por hablar con tu familia. Respecto a la tele ¿ por qué no intentáis apagarla a la hora de la comida o de la cena? Es una manera muy sencilla de fomentar la conversación en la familia.

Puedes hacer alguna obra de caridad. No es necesario que sea una aportación económica, que con esto de la crisis..... Ya lo he dicho más veces, hay personas que están más necesitadas de tu tiempo que de tu dinero.

Y por último, pero no por eso el menos importante. Un mensaje que a lo largo del año lo recibimos en presentaciones electrónicas muchas veces. Que lo leemos y pensamos que es cierto, pero que a los cinco minutos se nos ha olvidado. VIVE CADA DÍA COMO SI FUERA EL ULTIMO DE TU VIDA. MAÑANA QUIZÁ SEA TARDE.

Intentaré acordarme dentro de unos meses preguntar qué tal va vuestro propósito particular.